skip to main |
skip to sidebar
Cuestión de tacto
Entonces, la mujer de Onán se dió cuenta que éste, había mejorado la habilidad de sus manos para algunas cosas. Pero se puso triste, cuando le sintió el tacto; torpe y distinto, a la hora de acariciarla.
hp, junio 2006
No hay comentarios.:
Publicar un comentario